Nacer en una familia de artistas renombrados puede ser una ventaja considerable si uno quiere unirse al negocio del clan. Y, si tu tío se llama Francis Ford Coppola y ha realizado unos largometrajes tan indiscutiblemente influyentes como los de la trilogía de El Padrino (1972-1990), que te patrocine constituye un auténtico lujo. Pero algo […]